Hoy he tomado una cápsula a penas me desperté. Luego de tomar el desayuno, tomé otra cápsula más y fui a la universidad. Regresé a casa antes de lo esperado, el dolor se hizo constante y no había forma de pararlo. Almorcé en mi cuarto (raro, ¿no? nunca me dejan), y tomé una cápsula más. Esto es horrible, y en especial porque amo los medicamentos.
Pasaron 5 horas, el dolor se agudizo. Ya no podía moverme, mi cuerpo estaba algo rígido y las ganas de vomitar seguían acosándome. Luego de 4 horas, y después de haber consumido dos pastillas más (sigo pensando que es una broma de mal gusto), ya no sentía nada. Aproveché y cerré mis ojos: me quedé dormida. Sin embargo, algo interrumpió mi ácido sueño.
Era una luz, el reflejo de algo sobre la pared. Alguien hablando en un idioma que desconocía. Apenas pude darme cuenta de aquello, pues estaba como sedada. Abrí los ojos lentamente, pero mis pupilas estaban dilatadas, así que las imágenes eran borrosas. No recuerdo a quién le dije: "silencio, trato de dormir", pero funcionó.
ni lágrimas,
ni cuerpo,
ni cadáver,
ni alma.
Tan solo un frasco vacío de pastillas sobre la mesa.

4 comentarios:
dunno .
wanna talk?
im ears,
im voice
it's fine buddy.
posdata: quiero mi nota de la tercera calificada, LO MATARÉ.
nice knowing you´re alive
show up!
promise i will. i gotta tell you some funny stuff.
Publicar un comentario